lunes, septiembre 04, 2006

Partido de individuos

Sobre qué tipo de partido deseamos es pertinente hablar del partido de individuos o partido de cuadros frente a la clásica fórmula de individuos de un partido. No debemos confundir la acción individual en el ámbito de lo privado con la acción que se circunscribe dentro un proyecto de cualquier índole. Es decir, el objetivo de hacer énfasis en los individuos es la de fortalecer el papel de estos en los objetivos mismos de un partido; el individuo debe ser capaz de formularse iniciativas que le corresponden a todo ciudadano en el cumplimiento de sus derechos y obligaciones dentro del gobierno, Estado, organización social, etc. Pienso que el límite de la acción individual dentro de una organización, institución o ámbito público está dado en los acuerdos que se logren establecer en el marco de determinadas reglas del juego. Estas pueden resultar autoritarias o democráticas. Pero al preferir el ámbito democrático, si dos personas convencidas deciden impulsar un proyecto, ambos individuos tendrán que acordar mediante reglas establecidas por ellos mismos.

Con esto pretendo resaltar la importancia dentro de una organización política o partido de que sus integrantes a) comprendan la prioridad de los asuntos que se deben atender b) reflexionen sobre el mayor beneficio de ciertos acuerdos frente a la posibilidad que no todos los integrantes acepten dichos acuerdos, c) participen en los procesos de la toma de decisiones, d)acuerden determinadas reglas del juego para la toma de decisiones trascendentes, e) obtengan la mayor información sobre los asuntos o temas a debatir, f) puedan reconocer la transparencia de su organización, g) puedan sugerir, opinar y ampliar las posibilidades de crecimiento del partido.

Mediante la reflexión de los términos de un partido de individuos o partido de cuadros deseo expresar sobre la importancia de integrantes o militantes más participativos dentro de una organización política. Finalmente lo que debería impulsar cualquier partido es la mayor participación de la ciudadanía en el quehacer público. Pero para ello necesita ser congruente con su trabajo interno y se debe estar convencido que la formación de cuadros brinda a los integrantes de un partido mayor sensibilidad sobre la problemática de su organización interna y de su entorno político y social. Si nos ponemos a pensar como funcionan algunas organizaciones civiles, su fortaleza radica precisamente en la preparación y desarrollo de sus miembros. Ello irremediablemente influye en las tareas o el trabajo realizado con la sociedad. No tendría que presentarse un diálogo de sordos entre un partido político incluyente con sus integrantes y el resto de los ciudadanos. Seguro ésta visión puede ampliarse o ser enfrentada a un amplio análisis.

Citoyen